Ante todo es bueno comunicar que no soy un hincha muy fanático. Soy de Racing, herencia de familia. Una familia que tampoco es muy fanática.
La prueba: la primera vez que fui a la cancha fue en Diciembre de 2001, cuando Racing estaba por salir campeón. Racing – Vélez se jugaba en el Amalfitani y a su vez, en el Presidente Perón (estadio de Racing), se proyectaba el partido en pantalla gigante. Es conocido como el día que “Racing llenó dos canchas” y que además quedó en la historia porque se cortó una racha de muchos años.
Racing empató el partido 1 a 1, salimos campeones, invadimos el campo, corrimos por abajo de una bandera enorme con mi tío y Pablo, un amigo. Hasta nos llevamos pedazos del cesped, que estuvo en casa en una maceta, hasta hace poco. Todo un estadio del mismo equipo. Hiper-local, imaginate.